martes, 6 de marzo de 2012

soneto 29

SONNET 29

When, in disgrace with fortune and men's eyes,
I all alone beweep my outcast state
And trouble deaf heaven with my bootless cries
And look upon myself and curse my fate,
Wishing me like to one more rich in hope,
Featured like him, like him with friends possess'd,
Desiring this man's art and that man's scope,
With what I most enjoy contented least;
Yet in these thoughts myself almost despising,
Haply I think on thee, and then my state,
Like to the lark at break of day arising
From sullen earth, sings hymns at heaven's gate;
For thy sweet love remember'd such wealth brings
That then I scorn to change my state with kings.


Cuando hombres y Fortuna me abandonan,
lloro en la soledad de mi destierro,
y al cielo sordo con mis quejas canso
y maldigo al mirar mi desventura,
soñando ser más rico de esperanza,
bello como éste, como aquél rodeado,
deseando el arte de uno, el poder de otro,
insatisfecho con lo que me queda;
a pesar de que casi me desprecio,
pienso en ti y soy feliz y mi alma entonces,
como al amanecer la alondra, se alza
de la tierra sombría y canta al cielo:
pues recordar tu amor es tal fortuna
que no cambio mi estado con los reyes.

Adicciones

La primera dosis apenas empieza a hacer su efecto,  poco a poco el ánimo cambia, el cuerpo cambia, la pesadez y el cansancio se desvanecen, la mente está más alerta.


En la siguiente media hora voy a consumir otras dos dosis, que me llevan al éxtasis, al frenesí!   Ahora puedo afrontar todos los embates de la vida, abocarme a los trabajos más tediosos, a la rutina, a lo inesperado, a lo que sea..... porque ya tome CAFÉ!!!!